Bien, no se si yo pudiese decir oficialmente que estoy dentro de un armario porque bueno... soy bisexual, así que es algo difícil de decir. Pero ahora que me he inspirado quizá podría decir aquellas pequeñas cosas que me delatan pero a la vez me mantienen muy segura en un secreto (entiéndase armario o clóset) del que jamás creo poder ser libre.
Debo admitir que son cosas muy ambiguas pero soy una freaky y mientras mis padres no se enteren pues no estoy en problemas ya que bueno mi madre es devota a la religión y mi padre no se queda muy lejos diciendo que todo acto homo es aberración... ¡Orshhh! como odio no poder gritarles que su propia hija está enamorada de una chica y que su hijo es un total afeminado -sin ánimos de ofender a nadie pero ese niño enserio tiene algo raro- pero no lo ven porque tienen su mente cerrada en un mundo sexista que ordena la normalidad como "hombre-mujer" y todo lo demás está condenado.
Pero creo que estoy divagando así que vuelvo a mi tema...
-A ver, mis amigos siempre me molestan porque alguna que otra vez expresé mi posible atracción a las chicas y si no es eso entonces es porque prácticamente le comí la cara a mi ex (hombre) justo en el patio del instituto pero solo diré a mi defensa que nos estábamos reconciliando.
-Cada vez que encuentro un tema tal cómo cuanto amaba Safo a su diosa Afrodita, se lo lanzo a mis padres en cara simplemente tanteando terreno.
-La mayoría de mis amigos son hombres porque es más fácil hacer amistad con un chico. Mis amigas son otra historia... una es el propio estereotipo lésbico aunque sea homofóbica -más precisamente lesbofóbica-, otra está a punto de casarse teniendo dieciséis y las demás son familia o simplemente las he conocido durante mucho tiempo.
Hmm bueno supongo que soy bastante ambigua y aparte hace mucho no permito que nadie me conozca en totalidad así que, preferencias sexuales a un lado, siempre he estado en un armario o como yo prefiero decirle: una burbuja de cristal porque siempre hay algo que estoy escondiendo aunque esté a simple vista para todo aquel que de una segunda vista y se muestre interesado en saberlo realmente.
Así que mi respuesta es: todos, de alguna u otra manera, vivimos en un armario porque ocultamos cosas y eso nos lleva a estar escondidos -cosa que es prácticamente el concepto de estar en un armario-.
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